Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de abril, 2014

García Márquez

Cubierta de El coronel no tiene quien le escriba (1968),  primera edición en la Colección Índice de Editorial Sudamericama.   He dejado pasar unos días antes de hablar del recientemente fallecido Gabriel García Márquez. Todavía resuenan los ecos de las muchas loas. Las ha habido desbordadas, excesivas; y tampoco han faltado  afirmaciones rácanas, casi mezquinas. Por mi parte me uno al coro de los que consideran que García Márquez es uno de de los grandes escritores en lengua española del siglo pasado. Claro está que no todas sus obras alcanzan el nivel de excelencia, y que sus últimas obras son más bien decepcionantes (nos tenía mal acostumbrados). Pero un escritor tiene derecho a ser juzgado por sus mejores obras, y en este sentido novelas como Cien años de soledad , El coronel no tiene quien le escriba o El otoño del patriarca (por cierto, qué bien titulaba García Márquez) quedarán como cumbres de la narrativa hispanoamericana. Leerlo por primera vez, a finales de los s

Los despojos de Cervantes

Andan estos días buscando con un georadar los huesos de Cervantes en el madrileño convento de las Trinitarias, sito en la calle de Lope deVega (vaya paradoja). Por favor, no sigan. No nos los merecemos. No después de tantos años de abandono y desinterés. El responsable del proyecto ha dicho que "está un poco nervioso y con ganas de empezar porque no tenemos muchos días". Tranquilo. Si no hemos sido capaces de encontrarlos en cuatro siglos, no vamos a pretender ahora encontrarlos en cuatro días. ¡País!

Suess

  Eduard Suess (1831-1914) Se cumplen hoy los cien años de la muerte del eminente geólogo austríaco Eduard Suess. Suess fue en su tiempo el mayor experto en tectónica alpina, y ha pasado a la historia de la geología por grandes aportaciones, como los conceptos del supercontinente Gondwana, el Mar Tetis, o la estructura concéntrica en tres grandes capas de la Tierra. Su obra cumbre fue Das Antlitz der Erde (1889-1909), en tres gruesos volúmenes, genial síntesis de los conocimientos geológicos a fines del siglo XIX.  El monumental tratado de Suess fue traducido al castellano por el ingeniero de minas Pedro de Novo y Fernández-Chicarro (1884-1953), alumno de Lucas Mallada y profesor de Geología en la Escuela de Minas de Madrid. Novo acometió la ingente labor en solitario, sin ayuda ninguna, hasta ver publicado la obra en los años veinte. Novo fue director del Museo Nacional de Ciencias Naturales y presidente de la Real Sociedad Gográfica y el Instituto de Ingenieros Civiles. Emp

Queridos libros

Eugene Field (1850-1895)       Muy pocas personas parecen darse cuenta de que los libros tienen sentimientos. Pero si algo sé con total certeza es esto: que mis libros me conocen y me aman. Cuando por la mañana me despierto y recorro con la mirada la habitación para ver cómo están mis amados tesoros, y cuando con alegría les digo: "¡Buenos días tengáis, mis queridos amigos!", con cuánto amor me miran, y qué contentos están de que mi descanso no haya sido perturbado. Cuando tomo alguno en mis manos, ¡con qué ternura responden a mi caricia y con qué alegría responden a mi pertición de consuelo!     Risa para mis momentos más alegres, distracción para mis preocupaciones, consuelo para mis pesares, charla ociosa para mis momentos de mayor pereza, lágrimas para mis penas, consejo para mis dudas, y seguridad contra mis miedos. Todo esto me dan mis libros, con una prontitud y una certeza y una alegría que son más que humanas. Por eso yo no sería humano si no amara a estos amig

Las cosas claras

"Las cosas deberían ser más sencillas. Debería haber el bien, el mal y nada en medio." (Guy Madison en Un hombre duro , de George Sherman, 1957. Guion de Leo Katcher)

Consejos a los tertulianos

ARTÏCULO IV. De las concurrencias o reuniones. Al tomar parte en las conversaciones no debemos ser demasiado habladores, porque cansaríamos a todo el mundo, ni demasiado callados, por no parecer como estatuas, cosa que desagrada infinito, porque da a entender que no tomamos interés alguno en los razonamientos de los otros.     El tono de la voz no ha de ser tan alto que ofenda los oídos, ni tan bajo que se perciba con dificultad: debemos hablar sin precipitación, y evitar el altanero desdén y la afectación empalagosa (...)     Cuando se suscite alguna cuestión, o diga cualquiera de los circunstantes alguna proposición contraria a nuestro dictamen, no hemos de ser demasiado fáciles en contradecirle, y aun cuando sea preciso debemos hacerlo con agrado y buen modo.     Sobre todo es menester guardarse de desmentir abiertamente a persona alguna, como diciendo es incierto, o no es así; antes cuando tengamos que contradecir alguna cosa, debemos primero pedir venia, y después añad

Lo arregla todo

Recojo en el casillero de la correspondencia una hoja con el siguiente anuncio: ---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Profesor  HALIM Gran vidente espiritual y especialista en todo tipo de problemas: Problemas matrimoniales  -Sentimentales, Recuperación de Pareja  -Amores, Atraer persona querida, Amor -impotencia sexual, Problemas familiares, matrimoniales, Suerte en los negocios, en el trabajo y exámenes, Atraer clientes (compra y venta). Mantener puesto de trabajo, Protección de vida familiar, Quitar mal de ojo y maleficios, Potenciar la sexualidad, Enfermedades crónicas, quitar demonios, El profesor HALIM arregla casos muy desesperados: Llamar al: XXXXXXXXX / XXXXXXXXX ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- (Tal como están las cosas, al profesor Halim no debe faltarl

Aznar, independentista

Muchos almirantes y generales no podían admitir sin repugnancia un estado de guerra entre el autoplaneta "Valera" y el Gobierno de Redención. "Valera" no era sino un gigantesco transporte de tropas que operaba bajo la bandera del Gobierno redentor. ¿Podía hoy, después de tantos siglos de fiel subordinación al Gobierno de Redención levantarse el autoplaneta en armas contrra su legítimo Gobierno?    -¡Sí, podemos! -contestó Miguel Ángel Aznar descargando un violento puñetazo sobre la mesa que presidía-. Creo que ha llegado el momento en que "Valera" debe declararse independiente. (...) Nunca razones de más peso apoyaron la petición de independencia de ninguna colonia terrícola. Y a menos que abominemos de nuestra religión y nuestras costumbres, y nos resignemos a ser pasados a cuchillo por esa multitud de monstruos encefálicos, tenemos que proclamarnos independientes... ¡ahora mismo!    La rotunda proposición de Miguel Ángel Aznar dejó sumidos a los alt

Danilo Kis

A quien le interese, en el último número (55) de El Cuaderno puede leerse un artículo mío acerca del escritor serbio Danilo Kis.

Primera noche: detalles

Alfred Hayes (1911-1985) Siempre dije que recordaba cada detalle de la primera noche que pasamos juntos: recordaba, por ejemplo, que nevaba, que el taxímetro, coronado por un resplandor asmarillo, hacía ruido a medida que bajaban las fichas, y que ella se sentía excitada dentro del auto calefaccionado, con su mano en la mía, pero también triste, triste en su interior, como cuando te gusta un hombre, sabes que va a pasar algo con él y lo decidiste incluso antes de que pase, como para que él no tenga que pedirlo; es algo (agregó ella, explicando cómo se siente una mujer en una situación tan representativa) que tú sientes y él siente, una tensión placentera entre ambos, una tirantez sedosa, mientras esperas llegar a alguna parte, su departamento o el propio o la habitación de una amiga o un hotel o incluso una ruta de campo desierta, de manera que te hundes en un trance de expectativa, algo delicioso que, de algún modo, también es triste y, a causa de la tristeza, te sientes present

Reedición

El anónimo protagonista de estas insólitas confesiones, un liberal atrapado en la turbulencia del absolutismo de la época fernandina, vive con una única y obsesiva pasión: los libros. Pasión que, en gran medida, será la causa de los más cruciales cambios en su existencia y también de sus intensos placeres. En este relato el narrrador pasa revista a su pintoresca trayectoria vital, desde su inicial aversión a los libros, que le obliga a destrozarlos, hasta sufrir una pasión desmedida por ellos. Deseo o arrebato, tal vez sufrimiento, que le lleva a devorarlos en el seno del selecto Book eater's club londinense.     En las páginas de esta novela habitan excéntricos personajes de vidas dramáticas y misteriosas, conducidos por la suave ironía del autor. El particular fetichismo de Jorge Ordaz, sus reflexiones y curiosa erudición acerca del mundo de los libros, sin duda seducirán al lector, haciéndole participar de tan sorprendente inclinación. Será difícil olvidar esta nueva est