Oraciones sobre la casa

 

 

Los sueños nocturnos se aceleran dentro de las estancias inamovibles.

Los libros en la biblioteca de una casa envejecen con los habitantes de la casa. 

Los ojos de una mujer observando a través de un hueco de una persiana vuelven plausibles los ojos del pavo real. 

Las pesadez del granito de una casa proviene de la absorción de la piedra de la melancolía de la casa. 

Se invita al aire a entrar cuando una mujer abre una ventana.

Una casa desconfía cuando se introduce un armario en una habitación insatisfecha.

Una casa se sonroja cuando una mujer se sujeta el cabello. 

Los cajones que contienen prendas de seda son los féretros de pecados pasados. 

La altura de la puerta de una casa es para que entre en ella el hombre; el ancho de la puerta de una casa es para que el hombre salga: una dimensión para la vida, la otra dimensión para la muerte.

La casa acoge a la Muerte tras haber vivido su vida.  

(John Hejduk, Oraciones sobre la casa y otras oraciones. Traducción de Juan López Vergara Newton y Sergio Ortiz. Ediciones Creativas de Occidente, Guadalajara, México, 2022).