Un poema de Manzanares
Francisco Manzanares
DESALUNÁNDOTENOS
En el silencio solo
tan solo, el gran silencio
de miles de kilómetros de ausencia
Vivirte.
Amarte.
Silencio.
Solo suena el silencio
y en él
el eco de un amor crucificado,
de nuestro amor
Ausencia...
el mar guerrífico
que se alarga ausentándonos azules.
El mar enántico
que nos divide en cuatro o en ninguno.
El mar fueriterráneo
que se ausenta de muerte y nos diluye.
El mar surfíndico
tableteante de Félixes rebullentes.
Océasis de luz
en años y en minutos
que nos alunan, asolan y desolan.
La estrella de una espuma
clavicordial,
meteórica de disonancias tristes.
El mundo enmierdecido
que me ahorca el tobillo
colgándome del palo de mesana.
Y de nuevo el silencio.
Amarte,
solo amarte.
Filtrar en coladores de recuerdos
el zumo de una noche de gaviotas
mientras espero en ti
profundamente,
amor,
ensilenciado.
(1972)
(Francisco José Manzanares Argüelles, en "Poemándotenos". Anuario de la Sociedad Protectora de La Balesquida, nº 7, Oviedo, 2022).
"Quedemos ahora en silencio y pueda hablar el Dador de la palabra. Guardemos silencio para oír en la noche Su secreta llamada." RUMI
ResponderEliminarSabiduría persa
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