A veces la vida parece una broma. Te despiertas por la mañana, posas el pie y chillan los huesos. Vas al cuarto de baño y nada fluye igual. Te olvidas de poner el café en la cafetera, el cuchillo de la mantequilla se te cae al suelo, al recogerlo las lumbares te baldan de un trallazo y al incorporarte, simiesco ademán, algo en tus pulmones duele y se quiebra. Después, ante el espejo, reconoces frente a ti las formas de tus antepasados, la burla de sus sombras. Aceptas convivir con tus dolores y con tus vicios y defectos que ya no son la mejor compañía. Te remiras en el espejo y ves al hombre que te habían anunciado y que nunca imaginaste llegarías a ver. Y todo te parece una maldita broma. (Javier Lasheras, Entra sin miedo en la luz más antigua . Algaida, 2022).