"Dos casados vizcaínos traxeron desde aquel reino a Horta una hija, que era sorda y muda de nacimiento; y poniéndola a los pies del venerable Fray Salvador, les dixo que estuviesen ocho días en la Iglesia orando a Nuestra Señora, y que después hablaría la muchacha. Pasados quatro días habló, pero en lengua catalana, conformándose con el idioma del territorio en que estaba. Entonces viendo hablar a la muda gritaron todos: Milagro , milagro . Pero sus padres como no entendían aquella lengua estaban descontentos, y levantando la voz decían que ellos no querían, ni pedían, que hablase su hija lengua catalana, sino vizcaína; y fueron a Fray Salvador, que le quitase la lengua catalana y le diese la vizcaína. Él les respondió: Vosotros proseguid la oración de los ocho días, que yo también continuaré la mía . Y cumplidos los ocho días, delante de los muchos que concurrieron a ver la novedad, dixo: Amigo, la Virgen Santísima quiere que la niña hable catalán mientras esté en el reino de Cat
No voy a afirmar aquí que el dinero sea la raíz de todos los males pero considero el afán de lucro desmedido como el auténtico cáncer de nuestras sociedades actuales. No todo está en venta, ni se puede comprar. El dinero debería ser un medio y no un fin en sí mismo. La voracidad insaciable de una minoría se traduce en consecuencias devastadoras para el resto. Sanas iniciativas como la renta básica universal y de los iguales tratan de paliar éstas distorsiones del sistema. Convirtamoslas en una realidad.
ResponderEliminarAsí debería ser, pero lamentablemente aún priva la opiniónde de McCrea.
ResponderEliminar¡Frase lapidaria!
ResponderEliminarDonde las haya...
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