Vista del volcán Mayón, tomada desde el camino de Albay a Daraga. (Grabado inserto en E. Abella y Casariego, 1884). Leo en los periódicos que el volcán Mayón, en el extremo sureste de la isla de Luzón, en Filipinas, ha vuelto a explotar. Esta vez el balance provisional ha sido de cinco víctimas mortales. Los vulcanólogos han asegurado que se trata de una explosión de tipo freático. El Mayón -que exhibe un hermoso cono volcánico- es uno de los más activos volcanes del archipiélago filipino, y en su haber se cuentan varias erupciones históricas. Una de las más importantes por sus efectos devastadores fue la de 1814. En un trabajo del ingeniero de minas y geólogo español Enrique Abella y Casariego sobre el Mayón, o volcán de Abay, publicado en el tomo XI (1884) del Boletín del Mapa Geológico, se cita el testimonio del párroco de Guinobatan, testigo de la erupción de 1814: "Abrasó y arruinó enteramente los pueblos de Camalig, Cagsaua y Budia, con la mitad de Albay, lo mi