Respeto
-¡Respetar! Nosotros, los españoles de todas clases sociales y por los cuatro puntos cardinales, de nuestra piel de toro, debemos aprender a respetarnos. Respeto quiere decir que se pueden compartir juntas, de manera constructiva, todas las opiniones. Las que predominen deben ser las que dirijan. Entiéndame claro, ya que quiero decir mandar, es decir gobernar, es decir admnistrar con honradez, sin trampas y sin ambiciones personales, que es la única manera de que podamos creernos que se quiere a la patria (...) Mire bien que digo administrar, no politiquear. Hora es ya de que los políticos aprendan a pensar que los demás ya sabemos que lo suyo es una profesión, no un reguero de vanidades, categorías y posiciones, ni un motivo de almacenar prontas riquezas. Ya le he dicho que el mundo dio un tumbo estos años y que no son tan difíciles los problemas de administrar un país como para que no podamos resolverlos bien pronto, aunque sea copiando para ir más deprisa, como lo han hecho mejor los otros, pero haciendo que nos lleven a un fin verdaderamente práctico, progresivo, de auténtica paz, comprensión de unos hacia los otros, porque todos lo queremos, ¿no es así?
(María Dolores Boixadós, Retorno. Editorial España Errante, México, D.F., 1967).
Madre mía, ojalá los políticos actuales leyesen ese párrafo y, lo que es más importante, lo entendiesen y lo practicasen. Mejor aún, que los políticos de todos los tiempos y a cualquier nivel, llevasen en sus cromosomas impresa esa norma; que esa norma fuese requisito indispensable para dedicarse a esa profesión También a algunas otras, pero en fin.
ResponderEliminarGracias Jordi.
Gracias, Lope. Se entiende que esta novela permanezca aún inédita en España.
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