Sireno

El merman del Museo Booth de Historia Natural de Brighton


En el siglo XIX se vieron en Inglaterra varias sirenas. La pequeña mermaid pescada por el capitán Eade en aguas de Batavia fue una sensación cuando se exhibió en Londres en 1822. Luego vino la sirena de las islas Fiyi, adquirida por el empresario circense Phileas T. Barnum en 1842 para su Museo Americano de especímenes bizarros. El naturalista inglés Francis T. Buckland -de quien ya he hablado en esta cámara de maravillas a propósito del "Innombrable"- examinó nada menos que tres supuestas sirenas en la década de 1850.
A finales del siglo XIX el coleccionista W. H. Willett, Esq., donó al Museo Booth de Historia Natural de Brighton un merman o sireno disecado, artefacto procedente de algún punto del sudeste asiático donde dichas confecciones eran relativamente frecuentes. El merman mide unos 35 centímetros y se le considera macho porque solo tiene dos pezones (al parecer las sirenas suelen tener más de dos).


Comentarios

(6)
  1. La naturaleza tiene unas cosas tan curiosas.

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  2. Vaya, lo de "artefacto" y "confecciones" destruye el encantamiento.

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  3. R´lyeh o el pueblo de Dagón.
    Algún día se hablará del mito humano, entre zambullida , escama fresca y fósil de arpón.

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  4. Tienes razón, Ferrer: me traicionó la parte de racionalista.

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  5. Me facinan estos temas. Me gusta pensar que existen, es bueno leer estos artículos de una fuente confiable, aunque aun nadie pueda dar fe de su existencia.

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