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Fiestas en Olot



Pyrene fue una revista mensual dedicada a las artes y las letras, que se publicó en Olot a mediados de los años cincuenta del pasado siglo. Adscrita al Patronato de Estudios Históricos Olotenes, se imprimía en los talleres tipográficos de Pere Aubert con notable cuidado estético, y sus contenidos (en castellano, si bien se incluían poesías en la "lengua vernácula") iban desde la crónica local y comarcal a temas más generales, con especial énfasis en literatura, pintura, música, historia y arqueología. Entre sus colaboradores habituales estaba lo más granado de la intelectualidad olotense del momento: Josep Munteis (que actuaba al principio como director), Oriol Prat Moliner, Eduard Cuéllar, Ramon Grabolosa, Carles de Bolós, Lluís Armengol, Rafael Torrent... El crítico de arte José Francés, que fue invitado a presidir los Juegos Florales celebrados en Olot en 1949, calificó a Pyrene como "una de las más nobles, bellas y puras revistas de nuestro tiempo".
En el número 6, correspondiente a septiembre de 1949, dedicado a la Virgen Patrona de la "muy leal Villa", Nuestra Señora del Tura (cuya festividad se celebra el 8 de dicho mes) se recupera en un artículo el programa de festejos del año 1859. En él, junto a pasacalles, desfiles de gigantes, enanos y caballitos, bailes, fuegos artificiales, oficio cantado, procesión y un globo aerostático, figura para el día 9 (con repetición al siguiente) un espectáculo taurino:
"A las tres de la tarde la Cuadrilla de Toreros recorrerá con música las calles de esta Villa y se dirigirá luego a la plaza de toros para dar principio, previa la autorización de la superioridad, a la corrida de vichos (sic) Navarros, en la que dicha cuadrilla divertirá al público con sus pantomimas y demás juegos del arte Tauromáquico, y finalizará la función dando muerte a uno de aquellos".

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Premio Nadal 1944

El jurado del primer Premio "Eugenio Nadal" (Café Suizo, Barcelona, 6 de enero de 1945). De izquierda a derecha: Juan Ramón Masoliver, Josep Vergés, Rafael Vázquez Zamora, Joan Teixidor e Ignacio Agustí.  En un artículo titulado "Premios literarios, cartas marcadas", publicado recientemente en un diario digital su autor Daniel Rosell analiza el trasfondo de premios tan prestigiosos como el Nadal y el Planeta a lo largo de su ya larga historia. Refiriéndose al primero de ellos, Rosell escribe: "Siempre hay alguien que recuerda que el el primer premio Nadal lo ganó una desconocida Carmen Laforet, que se impuso a González Ruano, a quien se le había garantizado el premio." Y añade: "Es emotivo, incluso tiene elementos épicos la historia de una joven desconocida que se alza con un galardón literario al que aspiraban los nombres -todos masculinos- consagrados de las letras de entonces, pero ¿por qué no poner el acento en González Ruano? (...) En otra

Pìanos mecánicos

De Los organillos , de Henri-François Rey, publicada a principios de los años sesenta, recordaba más su versión cinematográfica, titulada Los pianos mecánicos como el original francés, que la propia novela. Yo estaba en Cadaqués el verano en que se rodó la película, y tuve la ocasión de ver de cerca a dos de sus intérpretes más conocidos: James Mason y Hardy Krüger. La protagonista femenina era Melina Mercouri, pero a ella no tuve la suerte de verla. El filme lo dirigió Juan Antonio Bardem y, aunnque no es una de sus mejores películas, sí es una de sus producciones internacionales de más éxito comercial. A Henri-François Rey, que pasaba largas temporadas en Cadaqués (Caldeya en la ficción), también lo  tenía visto por el bar Marítim o el café Melitón (título, por cierto, de su última novela). En su momento la novela fue un éxito de ventas y de crítica (llegó a finalista del Goncourt y ganó el Interallié).Leída al cabo de los años puedo asegurar que no solo se sostiene muy bien