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Mark Twain

Mark Twain (1835-1910)

Al igual que otros escritores que pasaron por Hawai -Hermann Melville, Robert L. Stevenson, Jack London...- Mark Twain quedó fascinado por el paisaje volcánico de las islas. En 1866, a la vista del borboteante volcán Kilauea exclamó: "¡Aquí hay motivo para hacer trabajar la imaginación!"
En varios de sus papeles incorpora Twain léxico geológico (le gustaban mucho las expresiones "Old Oolitic Silurian" y "Old Red Sandstone") y también se interesó por la escala del tiempo geológico y la edad de la Tierra. Al principio Twain era escéptico con los geólogos y el empleo de la cronología de las eras geológicas, pero a partir de 1884 su visión de estos problemas cambió.
Así, en el ensayo de 1903 "¿Se hizo el mundo para el hombre?" (generalmente incluido en el libro póstumo Cartas desde la Tierra),Twain hace referencia a Lyell y respalda la edad asignada a la Tierra por lord Kelvin, cifrada en unos 100 millones de años; hipótesis a la que se oponía la mayoría de geólogos, que propugnaba una edad mucho mayor. Para Twain, sin embargo, la edad propuesta por el físico inglés ya le parecía mucha. Con su habitual ironía escribe: "De acuerdo con estas cifras (de Kelvin) se tardaron 99.968.000 años en preparar el mundo para la llegada del hombre, a pesar de lo impaciente que, sin duda, debía sentiorse el Creador por verle y admirarle. Pero una empresa de esta magnitud debe llevarse a cabo cautelosa, meticulosa, lógicamente."
Más adelante nos brinda Twain una brillante imagen de la duración de la presencia humana sobre el planetaTierra. "Si la torre Eiffel representara la edad de la Tierra, la capa de pintura de la pequeña bola que la remata supondría la participación humana en esa porción de tiempo; y todo el mundo percibiría de inmediato que la torre se había construido para esa capa de pintura. Supongo que así sería; no sé."

Comentarios

  1. Gran escritor, me encantan sus escrituras, su forma de expresarse.. recomiendo sus libros!

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  2. Increible hombre, no solo escritor.

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  3. Para conocerle más nada mejor que leer su Autobiografía.

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  4. La vida trató de forma terrible a Samuel Clemens cuando ya era el famoso Mark Twain, para regocijo de los inquietos por sus sátiras contra lo establecido (en especial la religión).
    Tal vez debería haberse enamorado más de los paisajes volcánicos en sus viajes, y quedarse.
    Aunque así no nos habría dejado toda esa obra genial final llena de desencanto y certeza.

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