"Dos casados vizcaínos traxeron desde aquel reino a Horta una hija, que era sorda y muda de nacimiento; y poniéndola a los pies del venerable Fray Salvador, les dixo que estuviesen ocho días en la Iglesia orando a Nuestra Señora, y que después hablaría la muchacha. Pasados quatro días habló, pero en lengua catalana, conformándose con el idioma del territorio en que estaba. Entonces viendo hablar a la muda gritaron todos: Milagro , milagro . Pero sus padres como no entendían aquella lengua estaban descontentos, y levantando la voz decían que ellos no querían, ni pedían, que hablase su hija lengua catalana, sino vizcaína; y fueron a Fray Salvador, que le quitase la lengua catalana y le diese la vizcaína. Él les respondió: Vosotros proseguid la oración de los ocho días, que yo también continuaré la mía . Y cumplidos los ocho días, delante de los muchos que concurrieron a ver la novedad, dixo: Amigo, la Virgen Santísima quiere que la niña hable catalán mientras esté en el reino de Cat
Con esa declaración no se va a ningún sitio. Es probable que sus sueños no alcanzaran a superar su vida de galán. Pobre hombre.
ResponderEliminarA lo mejor quería decir que al ser pequeños los sueños son más realizables. Quién sabe.
ResponderEliminar¿No te planteas hacer una especie de reflejos de laberinto? Con la cantidad de frases que recopilas tendrías para un buen tomo.
ResponderEliminarSaludos Takanawenses.
Con el tiempo, quién sabe. Tal vez me anime.
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