Viendo ciertas novedades editoriales que pueblan actualmente los escaparates de las librerías, a uno le viene a la mente aquella frase del bibliógrafo Jules Le Petit: "Que los dioses inmortales te asistan y te guarden de las nuevas novelas."
"Dos casados vizcaínos traxeron desde aquel reino a Horta una hija, que era sorda y muda de nacimiento; y poniéndola a los pies del venerable Fray Salvador, les dixo que estuviesen ocho días en la Iglesia orando a Nuestra Señora, y que después hablaría la muchacha. Pasados quatro días habló, pero en lengua catalana, conformándose con el idioma del territorio en que estaba. Entonces viendo hablar a la muda gritaron todos: Milagro , milagro . Pero sus padres como no entendían aquella lengua estaban descontentos, y levantando la voz decían que ellos no querían, ni pedían, que hablase su hija lengua catalana, sino vizcaína; y fueron a Fray Salvador, que le quitase la lengua catalana y le diese la vizcaína. Él les respondió: Vosotros proseguid la oración de los ocho días, que yo también continuaré la mía . Y cumplidos los ocho días, delante de los muchos que concurrieron a ver la novedad, dixo: Amigo, la Virgen Santísima quiere que la niña hable catalán mientras esté en el reino de Cat
Cuanta razón tenía. Y… cuanta razón tienes tu al recordarlo.
ResponderEliminarUn abrazo
¿Con sólo mirar un título se conoce su contenido? ¿Rige para los libros la misma estrategia que para evaluar al prójimo? Desde luego, o ese Petit posee el don de la visión preclara, o hace honor a su apellido...
ResponderEliminar¡Qué viejo, y qué cansado, suena desconfiar siempre de lo nuevo!
ResponderEliminarNo creo, Arsenio, que se trate de desconfianza, sino de prevención. Prevención contra lo que muchas veces se nos quiere vender como "nuevo" u "original", y en realidad no lo es.
ResponderEliminarPor supuesto que esto no supone ir en contra de lo nuevo por sistema. Pienso, además, que la frase de Le Petit, con su invocación a los "dioses inmortales", contiene una cierta dosis de ironía...