Ir al contenido principal

Wordsworth

El hecho de que el nacimiento de la geología moderna coincidiese en Inglaterra con la explosión del romanticismo literario propició un circuito de enriquecimiento mutuo del que se beneficiaron tanto escritores como científicos. En este sentido la geología deviene una disciplina "poética", y si hay un poeta en el que la geología ejerció una influencia directa este fue William Wordsworth (1770-1850).
Se ha dicho, basándose en un pasaje de La excursión (1814), que Wordsworth tenía en poca estima a los geólogos de campo, a quienes miraba como unos aburridos recolectores de hechos. Nada más lejos de la realidad. Esta supuesta falta de consideración se desvanece en cuanto profundizamos un poco en los conocimientos que de geología tenía Wordsworth y las relaciones que mantuvo con algunos geólogos de su tiempo. De hecho, son numerosos los ejemplos en los que la poesía y la prosa de Wordsworth reflejan el aprecio que sentía por la filosofía de la geología, de Whiston a Whewell pasando por Lyell. Aspectos como la magnitud del tiempo, el diluvialismo, el glaciarismo, o los agentes que modelan el paisaje de la superficie terrestre están presentes en sus obras.
A lo largo de su vida Wordsworth hizo amistad con algunos geólogos, como George Bellas Greenough y Adam Sedgwick. Este último, profesor en la universidad de Cambridge, estudió la geología del Distrito de los Lagos -donde el poeta residió los últimos cincuenta años de su vida- y sus Letters sobre este tema fueron incorporadas por Wordsworth a la edición de 1843 de su obra A Guide to the Lakes. En palabras de John Wyatt (Wordsworth and the Geologists, 1995), el autor de El preludio fue "el poeta por encima de los demás que infundió a las piedras mudas un lenguaje activo".

Comentarios

Entradas populares

Criterion

  Sin lugar a dudas, The Criterion , fundado y editado por T. S. Eliot en 1922, es una de las mejores revistas literarias británicas del siglo XX. La nómina de colaboradores que tuvo este magazine trimestral, hasta su último número publicado en 1939, conforma un catálogo bastante representativo de lo más granado de la intelectualidad, no solo británica, del período de entreguerras. En sus páginas escribieron luminarias como Pound, Yeats, Proust o Valéry, por citar solo cuatro.   El primer número de The Criterion , salido en octubre de aquel annus mirabilis , es realmente impactante y marca el sello característico de su editor, expresado a través de sus "Commentary"; a saber, la compatibilidad entre una ideología ideología católica y conservadora y una defensa a ultranza de la vanguardia modernista. En este ya mítico número 1, se incluye, por ejemplo, la primera aparición en letra impresa de The Waste Land de Eliot, y la crítica encomiástica de Valéry Larbaud del Ulises, de

Un milagro de san Salvador de Horta

"Dos casados vizcaínos traxeron desde aquel reino a Horta una hija, que era sorda y muda de nacimiento; y poniéndola a los pies del venerable Fray Salvador, les dixo que estuviesen ocho días en la Iglesia orando a Nuestra Señora, y que después hablaría la muchacha. Pasados quatro días habló, pero en lengua catalana, conformándose con el idioma del territorio en que estaba. Entonces viendo hablar a la muda gritaron todos: Milagro , milagro . Pero sus padres como no entendían aquella lengua estaban descontentos, y levantando la voz decían que ellos no querían, ni pedían, que hablase su hija lengua catalana, sino vizcaína; y fueron a Fray Salvador, que le quitase la lengua catalana y le diese la vizcaína. Él les respondió: Vosotros proseguid la oración de los ocho días, que yo también continuaré la mía . Y cumplidos los ocho días, delante de los muchos que concurrieron a ver la novedad, dixo: Amigo, la Virgen Santísima quiere que la niña hable catalán mientras esté en el reino de Cat

Simpson

George Gaylord Simpson (1902-1984) George Gaylord Simpson fue sin duda uno de los importantes paleontólogos del siglo XX, especialista en mamíferos fósiles, gran teórico evolucionista y experto lingüista. Después de su muerte, su hija descubrió  entre sus papeles el manuscrito de un relato de ciencia-ficción escrito en los años setenta y titulado The Dechronization of Sam Magruder . Se publicó en 1996, con prólogo de Arthur C. Clarke y epílogo de Stephen Jay Gould. Fue traducido al castellano por María Belmonte y publicado al año siguiente por la editorial Mondadori con el título Entre dinosaurios . El relato de Simpson narra las peripecias de un "cronólogo", Samuel Magruder, que en 2162, y gracias a un proceso de su invención conocido como "descronización", viaja nada menos que ochenta millones de años atrás, o sea, al período cretácico. Magruder es consciente de que es el único humano en un valle poblado de gorgosaurios, celurosaurios, tiranosaurios y otros