Circunstancias familiares me han llevado en el mes de agosto a pasar unos días en Worthing, Sussex. Worthing es un agradable sea resort, con su Pier y su Marine Promenade al estilo Brighton, pero en pequeño. Como el tiempo no estaba para tomar el sol en la playa, me dediqué a recorrer librerías. A parte de la inevitable Waterstone’s, encontré una librería de viejo bastante bien surtida, Badger’s. Allí me compré una edición de 1821 de Gertrude of Wyoming and Other Poems, del escritor escocés Thomas Campbell, con preciosos grabados dibujados por R. Westall, y el ensayo W.H. Hudson. A Vision of Earth (1946), de Robert Hamilton. En la librería anticuaria Colin Page de la vecina Brighton, tuve la suerte de que me regalaran, por mi cumpleaños, un bello ejemplar, ricamente encuadernado en piel, de Curiosities of Natural History (Fourth Series), del naturalista y zoófago Francis T. Buckland, hijo del excéntrico geólogo William Buckland, publicado en 1900. Dicho ejemplar había sido obsequiado en su día por
"Dos casados vizcaínos traxeron desde aquel reino a Horta una hija, que era sorda y muda de nacimiento; y poniéndola a los pies del venerable Fray Salvador, les dixo que estuviesen ocho días en la Iglesia orando a Nuestra Señora, y que después hablaría la muchacha. Pasados quatro días habló, pero en lengua catalana, conformándose con el idioma del territorio en que estaba. Entonces viendo hablar a la muda gritaron todos: Milagro , milagro . Pero sus padres como no entendían aquella lengua estaban descontentos, y levantando la voz decían que ellos no querían, ni pedían, que hablase su hija lengua catalana, sino vizcaína; y fueron a Fray Salvador, que le quitase la lengua catalana y le diese la vizcaína. Él les respondió: Vosotros proseguid la oración de los ocho días, que yo también continuaré la mía . Y cumplidos los ocho días, delante de los muchos que concurrieron a ver la novedad, dixo: Amigo, la Virgen Santísima quiere que la niña hable catalán mientras esté en el reino de Cat
Worthing, Sussex... Tiene resonancias a relato de M.R. James, uno en el que llegara un erudito dispuesto a pasar unos días (y recorrer librerías) y de pronto le asaltase alguna presencia grotesca y fantasmal.
ResponderEliminarEspero que no te ocurriera. O que sí.
Un abrazo.
JLP
Pues no, no me topé con ningún fantasama en Worthing, pero en el imponente castillo de los duques de Norfolk, no me hubiese extrañado encontrarme con alguna presencia del pasado.
ResponderEliminarPor cierto, M.R. James es uno de mis escritores de ghost stories favorito (junto con Vernon Lee, de quien, por cierto, hablaré mañana).
Un abrazo.
Vernon Lee tiene un cuento fantástico (valga la redundancia), "La voz maléfica", que yo recuerde ahora. Espero ese post. De M.R. James no sé con cuál quedarme porque todos me gustan. Se agradecería otro post sobre M.R.
ResponderEliminarUn abrazo:
JLP
De momento ya puedes leer la entrada sobre Vernon Lee (que imagino que te sabrá a poco, pero tiene continuación en otra parte). Respecto a M. R. James también me gustaría hacer un post, pero más adelante.
ResponderEliminarUn abrazo.